Empezando la semana con bajo ánimo, si bien normalmente regreso motivada de mi fin de semana, ésta vez es la gran excepción.
Pienso por segunda vez en mi vida, que es muy malo comentar nuestros problemas a la ligera con personas cercanas, la mente es muy traicionera y el corazón guarda silencio cuando la mente nos grita cual es nuestro derecho, clásico:
"Las cosas no deben ser así esto está mal"...
"ya has esperado mucho tiempo ya te toca ganar"...
"no permitas que se burlen de ti, ya no más"...
En ese momento, el corazón está callado por que lo abruma y lo aturde la mente y el EGO, al momento de compartirlo, todo eso que dices suena como muy cierto y recibes consejos de tu amigo o compañero de trabajo, el cual te estima o por lo menos quiere alentarte a estar bien dándote frases como, "¿Ya vez, ya te diste cuenta tu mismo?, Ahora debes tomar la decisión.... Arrebatadamente y convencido de que es lo mejor dices: "Ahora es cuando, voy a hacerlo", y sí, realizas cambios drásticos en tu vida, renunciar a tu empleo, terminar una relación amistosa o amorosa, cambiarte de residencia, comprar una vivienda.... Y así de nuevo después del gran cambio para bien, aparece el corazón y te dice:
"¿Éstas completamente satisfecho, ahora estas mejor?"
TERRIBLEMENTE NO!!!!
El corazón te recuerda que antes de tu desconcierto, hay un motivo que te llevó a estar en ese lugar y una sensación de nostalgia interrumpe para recordarte que en su momento habías sido feliz......
NO ES FÁCIL MANTENER UNA SITUACIÓN COTIDIANA, LABORAL, DE PAREJA, DE AMISTAD.... siempre existen contratiempos, pero ésto debe demostrarnos que tenemos que ser fuertes y sortear las barreras que se nos interpongan.
MORALEJA:
"Cuando una gran tormenta se presente, debemos poner un stop a la mente, conservar la calma, no escupir palabras a lo bruto dejando que el EGO nos invada y nos exija una acción que después nos costará un duro precio por haber echado a volar la mente".
Luz Buelna, Culiacán, Sin. 29 de Abril de 2013.
